Tus ojos cual sombríos murciélagos
planeando en el centro mismo
donde nacen las pasiones
La sublimación de los deseos
azotándome sin perdones
La viscosidad de tus ansias
pegándose a mi ser
y los bajos instintos
llegando a borbotones
Tu oscuridad en mi luz
claroscuro sin dimensiones
La temperatura de tu piel
coartando la inocencia
torbellino de sensaciones...
que no encuentran razón de ser
que llevan tu rostro
y tus pantalones
XIMENA
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