Titilan las melodías de un arpa
remolinean en cada rincón
de este sagrado sitio,
entremezclándose con las hojas
que danzan sin detenerse
esperando un nuevo solsticio.
Oh milenaria canción que en mis oídos
es pasión creciente y trinos
también es luna y es noche
interminables cadenas de estíos.
Titilan las impredecibles cuerdas
atrapando singulares delirios.
Los árboles me cuentan en silencio
de sus incontables sacrificios.
No es facil vivir, de los suyos ,aislados
despojados de sincero cariño
desnudas sus extensas ramas
soportando un frio de siglos.
Cuando las flores encienden
sus perfumados cirios,
el plenilunio me baña de plata,
es el momento preciso
en que mi alma vuela sin rumbo
liberada el azul infinito.
Atraviesa increíbles distancias
buscando su ansiado destino,
hallando refugio en tu pecho
bajo tus sábanas blancas de hilo
y se enciende alocada en tu boca
mientras tú,mi amor, yaces dormido.
XIMENA
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